Lucirte este verano con el look más atrevido

La piel del escote es fina y muy propensa al foto-envejecimiento (ya que es una zona muy expuesta al sol) y a las arrugas verticales (influye la postura al dormir). Es por ello que debes cuidarla especialmente. Siempre que lleves el escote al descubierto, no olvides aplicarte un factor de protección solar alto. Da igual si no luce el sol, ya que los rayos solares penetran a través de las nubes y hacen peligrar la belleza y la salud de tu piel.

Además de mantenerla así, bien hidratada, la protegerás de posibles manchas y futuras arrugas.

Si quieres camuflar las manchas de tu escote, lo más probable es que tu corrector de ojeras sea demasiado claro, así que prueba con uno más oscuro. Puedes sellar el color, difuminar el corrector y hacer que así parezca tener un tono más uniforme con unos polvos que aporten un poco de tono a esta parte tan sexy de tu cuerpo. No olvides tener cuidado al perfumar esta zona, ya que la colonia puede dejarte manchurrones al mezclarse con los polvos.

Es importante, además, que apliques tus cremas cada noche. No olvides extenderlas desde el cuello hasta el nacimiento del pecho. También puedes optar por aplicarte, además del tratamiento anterior, una crema reafirmante del busto. Así podrás luchar contra la gravedad, provocada por el paso del tiempo.

Sí ya han aparecido en tu escote las temidas manchas, lo ideal será tratamientos combinados con láseres no agresivos. Consulta siempre con un médico, y conseguirás con los tratamientos además de eliminar algunas manchas, venitas, imperfecciones y arrugas finas de la piel, también aumentará la calidad y la textura de la misma, estimulando la formación de colágeno nuevo.

A la hora de dormir, también es conveniente que sujetes tu pecho con una camiseta que lo mantenga lo más firme posible, pero que te permita dormir con comodidad. Así, tu pecho no hará arrugas al colocarte de lado durante la noche.

Si vas a asistir a un evento importante y quieres lucir un escote de escándalo, utiliza este truco que te damos a continuación. Para ello, necesitaremos la clara de un huevo batida. Una vez esté lista extiéndela por todo el cuello y escote, y déjala que actúe por lo menos durante 10 minutos. Después, aclara con abundante agua tibia. Sécalo con cuidado y aplica una crema reafirmante, a poder ser con partículas luminosas. Verás qué suave y bonito queda tu escote.

Si hay algo qué odiamos al saludar es que se mueva, sin control alguno, nuestro antebrazo. Es algo muy común en la mayoría de las mujeres pasada una cierta edad, que se sientan incómodas al enseñar sus brazos, y se nieguen a usar camisetas sin mangas, ya que el descolgamiento de sus brazos por la mala alimentación les hace sentir muy incómodas.

La flacidez es la pérdida de la firmeza de la piel, la consecuencia de la degradación de las fibras de colágeno y elastina, dejando la piel y los músculos flojos. Puede afectar además al abdomen, los glúteos, los muslos y los brazos, como hemos señalado.

Para evitar esto, es imprescindible la realización de ejercicio físico, para tonificar la zona y conseguir así luchar contra el descolgamiento. Mueve los brazos. Los ejercicios más adecuados para reafirmar los brazos y conseguir unos hombros bonitos son los deportes que necesitan una raqueta, las actividades de baile o la natación, entre otros.